Pruebas y operación
Idioma
Entorno de prueba: caída de 1 metro y fregadero sin agua con 30 minutos de agua en el interior en reposo después de sacarla para abrir la carcasa para comprobar que no haya gotas de agua en el interior, luego recupere la carcasa y vuelva a funcionar normalmente.
Tanto el AT16 Mini Elock como el AT10S Slave Elock están sujetos a rigurosos estándares de prueba de impermeabilidad IP68 para garantizar su confiabilidad y funcionalidad en entornos exigentes. El proceso de prueba implica la simulación de escenarios del mundo real para evaluar la capacidad de los dispositivos para resistir la inmersión en agua y mantener su rendimiento.
El entorno de prueba para la certificación de impermeabilidad IP68 incluye someter los dispositivos a una caída de 1 metro en el agua, seguido de un período de espera de 30 minutos sumergidos dentro del agua. Después de este período, se abre la carcasa del dispositivo para inspeccionar si hay signos de entrada de agua. Este paso es crucial para garantizar que los componentes internos y los circuitos permanezcan secos y no se vean afectados por la exposición al agua.
Durante la inspección, se presta especial atención a comprobar si hay gotas de agua dentro de la carcasa. Este examen meticuloso garantiza que los sellos y las medidas de protección implementadas impidan eficazmente que el agua se filtre en el dispositivo. Si no se encuentran gotas de agua en el interior, indica que el dispositivo ha pasado con éxito la prueba de impermeabilidad IP68.
Después de la inspección, la carcasa se vuelve a montar cuidadosamente a su estado original. Este paso garantiza que el dispositivo siga funcionando y listo para el funcionamiento normal después de haber sido expuesto a la prueba de inmersión en agua. El proceso de reensamblaje implica sellar de forma segura la carcasa para mantener su integridad a prueba de agua.
Uno de los aspectos clave del estándar de impermeabilidad IP68 es la capacidad del dispositivo para seguir funcionando normalmente después de la prueba. El AT16 Mini Elock y el AT10S Slave Elock están diseñados para resistir la exposición al agua y mantener su rendimiento incluso en condiciones difíciles. Su certificación de impermeabilidad IP68 garantiza que se pueden utilizar en diversos entornos, incluidos aquellos con alta humedad, fuertes lluvias o posibles salpicaduras de agua.
En general, el AT16 Mini Elock y el AT10S Slave Elock se someten a pruebas exhaustivas de impermeabilidad IP68 para garantizar su durabilidad y confiabilidad. Estos dispositivos están diseñados para resistir la inmersión en agua y su desempeño exitoso en el entorno de prueba demuestra su capacidad para operar de manera efectiva incluso en condiciones exigentes y húmedas.
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